La palabra strudel proviene del alemán y se refiere a un tipo de postre o pastel tradicional de la cocina austrohúngara. Este delicioso dulce consiste en una masa muy fina y hojaldrada que se enrolla con un relleno de frutas, frutos secos o incluso queso.

El strudel es un postre muy popular en Europa Central y Oriental, especialmente en países como Austria, Alemania, Hungría o la República Checa. Se suele servir caliente, espolvoreado con azúcar glas o acompañado de helado de vainilla.

La palabra strudel se relaciona con la palabra alemana "Strudel", que significa "remolino" o "vórtice". Esto hace referencia a la forma en que se enrolla la masa con el relleno en su interior, creando una especie de espiral.

¿Qué quiere decir strudel de manzana?

Strudel de manzana es un postre tradicional de la gastronomía austriaca y alemana muy popular en todo el mundo. Este delicioso pastel consiste en un hojaldre relleno de una mezcla de manzanas, canela, azúcar y almendras.

La palabra strudel proviene del alemán y significa "remolino" o "vórtice", haciendo referencia a la forma en espiral que adquiere este postre al enrollar la masa con el relleno. La variedad más conocida es el strudel de manzana, aunque también se pueden encontrar versiones con otros ingredientes como ciruelas, cerezas o queso.

Para preparar un buen strudel de manzana, es importante utilizar manzanas ácidas que se deshagan con facilidad al cocinarse, así como hojaldre fino y crujiente. El resultado es un postre dulce y reconfortante que se puede disfrutar tanto caliente como frío, acompañado de helado o nata montada.

¿Quién creó el strudel?

El **strudel** es un delicioso postre de origen austrohúngaro, que se ha popularizado en muchos países europeos y del mundo. Se caracteriza por ser un pastel de hojaldre relleno de frutas, frutos secos o crema.

La historia del **strudel** se remonta al siglo XVII en Viena, Austria. Se dice que fue creado por **un pastelero austríaco** que buscaba innovar en la repostería tradicional de la época. Su receta original ha perdurado a lo largo de los siglos, siendo transmitida de generación en generación.

La popularidad del **strudel** ha trascendido fronteras, convirtiéndose en un postre emblemático de la gastronomía europea. Se relaciona con la cultura y tradición de países como Alemania, Hungría, República Checa y Eslovaquia, donde se prepara de diversas formas y con ingredientes locales.