Las alubias verdinas son un tipo de legumbre muy apreciado en la gastronomía asturiana. Se caracterizan por su color verde claro y su forma achatada. Debido a su delicado sabor y textura, son muy utilizadas en platos como la fabada asturiana.

Las alubias verdinas se recogen durante los meses de verano, generalmente en los meses de julio y agosto. Durante este periodo, las plantas alcanzan su madurez y las vainas se vuelven más grandes y verdes. Es importante recolectarlas en el momento adecuado para garantizar su calidad.

Una vez que las alubias verdinas se han recolectado, se deben secar y almacenar adecuadamente para su posterior consumo. Se recomienda colocarlas en un lugar fresco y seco, y evitar la exposición a la luz y la humedad. De esta manera, se conservarán en buen estado durante mucho tiempo.

Las alubias verdinas son muy versátiles en la cocina. Se pueden utilizar tanto en platos tradicionales como la fabada o el potaje, como en preparaciones más creativas. Su suave sabor permite combinarlas con diferentes ingredientes, como mariscos, verduras o carnes.

Si tienes la oportunidad de probar las alubias verdinas frescas, te recomendamos cocinarlas con mimo para disfrutar de todo su sabor y textura. Puedes acompañarlas con un poco de compango asturiano, un embutido típico de la región, para darle un toque aún más auténtico a tu plato.

En resumen, las alubias verdinas son recolectadas en los meses de verano y se deben almacenar adecuadamente para su correcta conservación. Su delicado sabor y versatilidad en la cocina las convierten en un ingrediente muy apreciado en la gastronomía asturiana.

¿Qué tipo de alubia es la verdina?

La verdina es un tipo de alubia verde muy conocida en la gastronomía asturiana, específicamente en la región de La Maragatería. Esta alubia es de forma redondeada y su color característico es verde pálido. Su tamaño suele ser pequeño, similar al de un garbanzo.

La verdina pertenece a la especie Phaseolus vulgaris, que es la misma a la que pertenecen otras variedades de alubias como la blanca, la roja o la negra. Sin embargo, se distingue por su textura suave y cremosa, además de su delicado sabor.

Esta legumbre es muy apreciada en la cocina debido a su versatilidad y su capacidad para absorber los sabores de los ingredientes con los que se acompaña. Además, se destaca por su alto contenido en proteínas, vitaminas y minerales, lo que la convierte en un alimento nutritivo y saludable.

La forma más tradicional de preparar la verdina es en forma de potaje, cocinándola a fuego lento con ingredientes como la morcilla, el chorizo, la panceta y las verduras. También se puede utilizar en ensaladas, cremas o guisos, siendo un ingrediente muy utilizado en la cocina vegetariana y vegana.

En conclusión, la verdina es un tipo de alubia verde muy valorada en la región de La Maragatería por su textura suave, su sabor delicado y su alto valor nutricional. Es un ingrediente versátil que se puede utilizar en una gran variedad de platos, desde potajes tradicionales hasta ensaladas frescas.

¿Cuándo se recogen las verdinas en Asturias?

Las verdinas son un tipo de alubia pequeña y verde que se cultiva en la región de Asturias. Se consideran un producto gastronómico muy apreciado por su textura y sabor únicos. Sin embargo, la recogida de las verdinas es un proceso delicado y en el que influyen varios factores.

La época de cosecha de las verdinas en Asturias generalmente es en otoño, específicamente entre los meses de septiembre y noviembre. Estas fechas son ideales porque el clima es más fresco y las alubias han tenido suficiente tiempo para madurar en las plantas.

Durante la recogida de las verdinas, es importante seleccionar cuidadosamente las legumbres para garantizar su calidad. Las alubias deben estar en su punto justo de madurez, ni demasiado verdes ni demasiado secas. Se recogen a mano, una a una, para evitar dañarlas.

Los agricultores asturianos que se dedican a la cultivación de las verdinas suelen tener años de experiencia en el proceso. Conocen el momento exacto en el que las alubias están listas para ser recolectadas y cuentan con la destreza necesaria para realizar la tarea de forma eficiente.

Una vez recogidas, las verdinas se someten a un proceso de selección minucioso para eliminar las deformadas o en mal estado. Luego, se lavan y se dejan secar al sol para un mejor almacenamiento. Es importante cuidar cada etapa del proceso para asegurar que las verdinas mantengan todas sus propiedades organolépticas antes de ser comercializadas.

En resumen, las verdinas se recogen en Asturias durante la época de otoño, entre los meses de septiembre y noviembre. Los agricultores asturianos realizan esta tarea de forma manual y seleccionan cuidadosamente las alubias para garantizar su calidad. El proceso de recogida y posterior preparación de las verdinas es fundamental para mantener sus características únicas y disfrutar de su exquisito sabor en platos típicos asturianos.